27/06/2018 09:40h Arévalo, ciudad mudéjar en Ávila
Arévalo, capital de la Moraña, del románico-mudéjar castellano y de los garbanzos blancos y tiernos, es un pueblo grande y noble, con un castillo, tres grandes plazas, media docena de iglesias (llegó a tener 14) y ora media docena de palacios de entidad.
Si bien la zona fue poblada desde tiempos antiguos, la fundación "oficial" de Arévalo data del año 1085, cuando llegan habitantes del norte de la península. Hasta 1135 integró el obispado de Palencia y luego al de Ávila.
Declarada Conjunto Histórico Artístico, Arévalo aglutina un buen número de bonitas plazas y calles y bellos monumentos dignos de ser visitados, entre los que cabe recalcar el Castillo, del siglo XV, la Muralla, de la que se conserva su parte norte con la Puerta de la Cárcel o Arco de Alcocer, que fue la entrada principal y que hoy lo ocupa la oficina de turismo.
El castillo de Arévalo ocupa un extremo del triángulo formado por la convergencia de los ríos Arevalillo y Adaja. Estaba unido a la muralla y la torre actual fue edificada sobre un torreón mudéjar.